El temor al médico retrasa el tratamiento de la depresión

Publicado por: @jaguirre el 12 julio, 2013
Depresion

La depresión es una enfermedad estrictamente bioquímica. Sin embargo, muchos de quienes la padecen no acuden al especialista antes de vivir una profunda crisis o un intento de suicidio. En ciertos casos, la ayuda llega tarde.

Los especialistas afirman que las personas deprimidas creen que es suficiente «poner de parte» para salir del problema o piensan que tarde o temprano se les pasará. La gente tiene miedo de ir al médico. A pesar de eso, la principal causa de atención siquiátrica es la depresión.

Este trastorno químico  se debe básicamente al mal funcionamiento de los neurotransmisores cerebrales, que son los encargados de enviar la información entre las neuronas.

Cuando no hay alteración, estos mantienen estable el estado de ánimo. Neurólogos, señalan que cuando sobreviene la depresión,  las sustancias: serotonina, noradrenalina o dopanina disminuyen. El organismo experimenta entonces pérdida o aumento de apetito, sueño, tristeza, abatimiento; se alteran los sistemas inmunológico, nervioso y endócrino. La mayoría de pacientes no asocia estos síntomas con cuadros depresivos. Llegan por dolores de cabeza, mareos,  insomnio. Un gran porcentaje de pacientes tiene trastornos sicológicos. Según dice, las mujeres sufren por acoso sexual, problemas de pareja o se sienten relegadas, ya sea en el trabajo o en su propio hogar. El mal de los hombres, en cambio, es el alcohol. Muchos de ellos, cuando están borrachos, se golpean en la cabeza y recaen en una depresión. Las consecuencias frecuentes, son la frigidez, en el caso de las mujeres y, en el de los hombres, debido a la excesiva ingesta de licor, la impotencia sexual. Los especialistas en el tema ya saben que en diciembre, febrero (sobre todo en San Valentín), y al final del ciclo escolar, aumentan los casos de depresiones y suicidios.

Las terapias

Existen tres factores que intervienen en el ciclo de la depresión y a los cuales se debe atacar: de carácter social, sicológico y biológico. El médico del centro de salud explica que la terapia sicológica cognitiva ayuda a revalorizar los conceptos que el mismo paciente tiene acerca de su existencia.

Esta técnica se usa cuando la persona está bien orientada en espacio y tiempo. En el aspecto social es necesario la ayuda de la familia, se deben  robustecer los nexos de solidaridad porque enaltecen la condición humana. «Tú puedes salir adelante» es una frase que sirve.

No se recomienda las actitudes compasivas porque son ofensivas para el paciente. Finalmente, la depresión requiere de fármacos porque hay que regular la alteración que se produce en los neurotransmisores. Las terapias se acompañan de medicinas para ver resultados positivos.

Seis recomendaciones para manejar los estados depresivos

La familia. Los especialistas aconsejan que los parientes sean comprensivos con el paciente y no represivos. Mientras más confianza y diálogo existe, es más fácil que se exterioricen los conflictos.

No consuma alcohol. Se trata de un depresor e inhibidor motriz e intelectual. El estado de ánimo se modifica y quienes lo consumen se exponen a traumas cráneo encefálicos, por golpes o accidentes.

La alerta. Cuando una persona expresa su deseo de matarse, hay que tomarla en serio porque puede ser una advertencia de que algo sucede. No se exaspere, aprenda a escuchar e identificar los síntomas de la depresión.

La consulta. Si no recibe ayuda médica, existe la posibilidad de que el individuo padezca episodios repetidos de la enfermedad o que ésta se vuelva crónica, a largo plazo.

No le deje solo. Los familiares deben observar y detectar los cambios conductuales que presenta el deprimido. Anímelo a que busque soluciones y no se encierre en sí mismo. Hágalo sentir importante.

Otras actividades. Para sacarle del encierro, llévelo a practicar deportes, a buscar un mejor trabajo, estudiar una carrera o retomar actividades que dejó de realizar.