La controversia de la Homeopatía. Sirve?
Mucha controversia hemos visto desde que la Homeopatía apareció en el mundo. Y no es para menos porque cautivó a muchos con sus procesos tan únicos, pero también porque se basa en conceptos totalmente diferentes a la medicina tradicional que ya todos conocemos. Se trata de una integración de cada individuo con la naturaleza, una búsqueda del equilibrio con la misma y la búsqueda de la energía revitalizante en ese equilibrio propio y con el mundo natural que genera una curación. Dado que está basada más en fundamentos filosóficos y personales de cada individuo, no se considera una ciencia y muchos creen que lo único que demuestra es el famoso efecto placebo, que por medio del auto convencimiento una medicina cura los síntomas de los cuales se padecen.
La homeopatía recurre al agua como principio fundamental y fuente de vida, por lo que sus tratamientos se basan en preparados diluidos de crea los mismos síntomas o condiciones que sufre la persona, pues cree que lo similar se cura con lo similar. Cuanto más diluida se encuentra la sustancia, mejor es su efecto.
Pongamos un ejemplo: un paciente que padece cáncer, una enfermedad terrible que asusta a cualquiera y lo pone en riesgo de muerte. sabemos que tratar ésta enfermedad es un proceso largo y doloroso, sobre todo desgastante con el paciente por los efectos de la quimioterapia. Pues bien, el papel de la homeopatía en éste caso no es el de curar el cáncer, sino contrarrestar algunos de los malestares que se generan, como las náuseas y vómito constantes, de ésta manera el paciente tiene mejor disposición física para seguir enfrentando la enfermedad. Mediante esa búsqueda de la energía revitalizante el mismo individuo busca su equilibrio, su propio bienestar y se ha comprobado que los pacientes en éste proceso afrontan mejor los efectos si llevan un tratamiento homeopático paralelo.
Hay que decir que la Homeopatía es un reto que no es fácil de enfrentar y no cualquiera puede. Es necesaria cierta madurez mental, emocional y espiritual para abrirse a los nuevos procesos, para reconocer que la naturaleza es perfecta y que de ella venimos, por lo tanto acudir a ella si puede ser una opción para quienes quieren empezar a combatir los efectos de las enfermedades. Es una cuestión de intentar con la mente abierta y total disposición a hacer un cambio desde adentro hacia afuera, pero para quienes es posible creer con fe ciega en la naturaleza, en si mismo y el equilibrio propio y necesitan de la medicina tradicional, como una ciencia comprobada, no hay nada que decir. Cada persona sabe qué necesita, hasta donde es capaz de llegar por su salud y de qué forma.
