De turismo por el espacio, un viaje fuera del planeta

Publicado por: @lnkvrd el 10 marzo, 2016
Blue Origin space travel company conducted a historic test on Monday by successfully launching and landing from Van Horn in Texas a reusable rocket, Space.com reported.

Pocas cosas han estado marcadas tan fuertemente en los sueños de la raza humana como la conquista de la última frontera, el espacio. Intuitivamente hace muchos siglos y luego con la certeza de los avances científicos nos hemos dado cuenta de que allí afuera están las respuestas a muchas de nuestras preguntas fundamentales. En un par de años el turismo espacial hará posible estar un poco más cerca de esos sueños y de esas respuestas.

Ver la curvatura de la tierra, sentir la falta de gravedad y experimentar como el cielo azul se transforma en el negro espacio profundo es lo que prometen los vuelos de turismo espacial. La compañía Blue Origin anunció que en el 2017 hará los primeros vuelos de prueba con humanos y para el 2018, si todo sale bien, llevará a los primeros turistas a más de 100 kilómetros por encima de la superficie terrestre. Claro, no todo es tan fácil, y para poder tener ese privilegio hay que reservar en una lista de espera que ya es bastante larga y estar dispuesto a pagar alrededor de 250 mil dólares por una experiencia que en total puede durar dos horas, pero que puede cambiar la vida.

Además de Blue Origin otras empresas están en la carrera por ofrecer el primer paseo más allá de las nubes. Virgin Galactic, Space X o XCOR Aerospace tienen propuestas similares en precio y diversión. Ya son más de 500 los afortunados que tienen un puesto asegurado en alguno de los primeros vuelos turísticos de estas compañías, famosos como Ashton Kutcher, Leonardo Di Caprio, Brad Pitt o Tom Hanks han desembolsado cientos de miles de dólares por el tiquete; se han hecho subastas por cupos que han alcanzado cifras que superan el millón de dólares y hasta compañías de seguros ya ofrecen pólizas para los nuevos turistas espaciales.

Si se tiene en cuenta que el primer turista espacial, Dennis Tito, pagó en el 2001 casi 20 millones de dólares por visitar la Estación Espacial Internacional, es posible pensar que en el futuro los viajes al espacio sigan bajando de precio y traspasar esa última frontera sea algo tan cotidiano como maravilloso.